¿Buscas espacio extra para almacenaje en tu dormitorio? Hay muchas formas de darle un buen uso a esos espacios sin utilizar y que son inusuales. Solamente tienes que ser un poco creativo a la hora de encontrarlos y convertirlos en huecos ingeniosos. Aquí tienes algunas ideas sobre cómo empezar.
Estantes elevados fuera del paso
Montar estantes de pared sobre las ventanas es un truco probado para ganar almacenaje para aquellas cosas a las que no necesitas acceso inmediatio cada día. Tener cajas con tapa es una buena elección para tener todo ordenado y sin polvo.
Deja un hueco práctico para almacenaje
Un estante junto al cabecero de la cama da lugar a una mesita de noche ancha con espacio suficiente para lámparas de lectura, libros y otras cosas a las que quieras acceder con facilidad. Debajo tienes espacio para una fila de cajas o cestar para almacenaje.
El clásico de debajo de la cama
Utilizar el espacio de debajo de la cama para almacenaje es el truco más viejo del libro. La única pregunta es cómo aprovecharlo al máximo. Un consejo de experto es usar cajas de almacenaje ligeras y no llenarlas demasiado. Así serán más fáciles de mover.
Escoge tus cajas para ropa favoritas
Sentarse en la solución
Los muebles con almacenaje incorporado son también una opción inteligente. Hay gran variedad de bancos y taburetes con almacenaje disponible dentro de ellos, así es fácil elegir uno que quede bien con el estilo de tu habitación a los pies de la cama.
Cojín de almacenaje fácil de hacer
Si tienes un edredón extra que quieres guardar, intenta enrollarlo con fuerza en una funda y ata las esquinas. ¡Ahí lo tienes! Ahora tienes un magnífico y grande cojín en el que echarte cuando estés reljándote en la cama.